Día mundial de la Prevención de Incendios Forestales: un llamado a la conciencia
Cada 18 de agosto se conmemora el Día Mundial de la Prevención de Incendios Forestales, una fecha destinada a concientizar a la población sobre las causas y medidas de prevención de estos desastres medioambientales, mayormente provocados por la acción humana intencionada o negligente. Esta fecha es fundamental para sensibilizar sobre los devastadores efectos que los incendios forestales pueden tener en los ecosistemas, la biodiversidad y las comunidades.
Los incendios forestales se caracterizan por su rápida propagación, su capacidad para cambiar de dirección de manera inesperada y por su potencial de saltar obstáculos como rutas y ríos.
No solo representan una amenaza constante para la vegetación, sino también para la vida y la propiedad. Aunque pueden ocurrir en cualquier momento del año, en nuestra región la temporada alta por riesgo de incendios se extiende de mayo a diciembre, cuando las condiciones climáticas facilitan su desarrollo.
El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (ahora Subsecretaría de Ambiente) informó el año pasado que el 95% de los incendios forestales son provocados por acciones humanas, ya sea accidentalmente o de manera voluntaria. Las estadísticas muestran un incremento en el número de incendios y en las superficies afectadas, lo que se relaciona directamente con el cambio climático. El aumento de las temperaturas y las sequías prolongadas crean condiciones ideales para que estos incendios se desaten con mayor frecuencia y severidad.
Medidas de prevención
Para combatir esta problemática, es crucial que la población adopte medidas preventivas que ayuden a evitar la generación de incendios forestales. Algunas de las recomendaciones clave incluyen:
- Solo hacer fuego en lugares habilitados: Utilizar espacios designados para fogatas y asegurarse de que estén despejados de vegetación y materiales inflamables.
- Delimitar la zona del fuego: Crear una barrera alrededor del fuego para evitar su propagación.
- Nunca dejar el fuego desatendido: Es fundamental vigilar el fuego en todo momento y contar con recipientes de agua cerca para extinguirlo rápidamente si es necesario.
- No prender fuego debajo de los árboles: Esto reduce el riesgo de que las chispas alcancen las ramas y provoquen un incendio mayor.
- Evitar arrojar colillas o fósforos encendidos: Las colillas de cigarrillos y los fósforos pueden causar incendios si se lanzan en áreas secas.
- Consultar recomendaciones locales: Al visitar parques o zonas forestales, es importante seguir las indicaciones y restricciones del lugar.